Tu suéter estirado volverá a la vida
Las prendas tejidas son las favoritas de mucha gente para usar en el invierno. Nada te hace sentir tan cómodo como un suéter de lana, especialmente si está hecho por una abuela o alguien que lo hizo para ti con amor. Pero no es un secreto que esta ropa se estira mucho con el tiempo.
Uno de los mayores enemigos de la ropa es la secadora. Si no tienes cuidado, tus prendas quedarán del tamaño del cuerpo de un niño y serán inutilizables. Sin embargo, en este caso, puede ser de gran ayuda. Achicar tu suéter estirado puede ajustar el tejido para que puedas volver a usarlo.